Un insólito suceso sacudió a Villa Carmela cuando un joven, dado por fallecido en un accidente, apareció en su propio velorio, dejando atónitos a familiares y autoridades que ya habían reconocido y entregado el cuerpo de otra persona.

El inicio de la confusión: Un trágico accidente

La insólita historia comenzó el pasado jueves en la madrugada, cuando personal de la comisaría de Alderetes tomó conocimiento de un hecho fatal en la ruta alternativa, a la altura del puente Ingeniero Barros. Según los primeros informes, una persona de sexo masculino se había quitado la vida arrojándose bajo las ruedas de un camión [00:01:09]. De inmediato, se activó el protocolo judicial correspondiente: la comisaría jurisdiccional intervino, se identificó al conductor del vehículo de gran porte, se le realizaron los dosajes de rigor y se dio intervención al personal de criminalística y al médico de la policía, quien constató el deceso y autorizó el traslado del cuerpo a la morgue.

El reconocimiento: El dolor de una madre

Con las primeras luces del día, la historia dio su primer giro. Una mujer se presentó de forma espontánea en la comisaría de Alderetes, manifestando con angustia que su hijo estaba desaparecido y que creía que la persona fallecida en el accidente era él. Ante esta declaración, y como parte del procedimiento, la policía acompañó a la madre para que realizara la identificación [00:02:24]. En un momento de profundo dolor, la mujer reconoció el cuerpo, confirmando que se trataba de su hijo. Con el reconocimiento oficial, la autoridad judicial autorizó la entrega del cuerpo a la familia mediante un acta de inhumación para que pudieran iniciar el velatorio.

La "resurrección" que desató el terror en el velorio

La noche de ese mismo jueves, alrededor de las 22 horas, la situación escaló a un nivel casi cinematográfico. Mientras la familia y amigos velaban los restos del joven en su domicilio de Villa Carmela, sumidos en el luto, el muchacho al que daban por muerto apareció en la puerta, vivo [00:03:39]. La aparición generó una mezcla de terror, estupor y conmoción entre los presentes, quienes no podían dar crédito a lo que veían. Inmediatamente, la comisaría de Villa Carmela se comunicó con la de Alderetes para informar sobre el increíble suceso.

El trasfondo del error y la resolución del caso

Las autoridades explicaron que el joven "resucitado" tenía problemas de adicciones y, según el testimonio de su madre, se había ausentado de su casa hacía varios días [00:04:36]. Esta desaparición, sumada a la angustia y al estado del cuerpo tras el accidente, fueron factores determinantes que llevaron a la madre a cometer el trágico error de identificación. La policía de Tucumán defendió su accionar, aclarando que se trabajó "con total seriedad" y que todos los pasos, incluido el reconocimiento, fueron debidamente documentados en actas oficiales [00:04:02].

Tras el insólito episodio, el cuerpo que había sido velado erróneamente volvió a ser un NN (No Identificado) en la morgue. Sin embargo, gracias a un "trabajo minucioso" de la comisaría de Alderetes, durante la tarde del día siguiente se logró ubicar a la verdadera familia del fallecido para que, esta vez sí, pudieran retirar el cuerpo y darle su último adiós [00:05:58].