Diez audiencias preparatorias totalizan las que se han realizado en esta primera etapa del año judicial, con vista al juicio por jurados por el crimen de Cecilia Strzyzowski, ocurrido el 2 de junio de 2023. En la última jornada, del jueves 17 de julio, pasó inadvertida la ausencia del abogado Gustavo Briend, quien fue reemplazado por su colega Matías Rojo en representación de Gloria Romero, mamá de Cecilia.
El letrado de Corrientes se tomó un descanso porque se viene una seguidilla de audiencias que se vaticinan serán intensas y maratónicas.
Los días 11, 13 y 14 son los que la jueza Dolly Fernández informó a las partes, pero la magistrada que conducirá el juicio más trascendental de la historia policial del Chaco ha repetido que se usará agosto para completar las que sean necesarias. Fernández, quien se mantiene cautelosa, sabe que tendrá tiempo para habilitar el juicio por jurados entre septiembre y octubre, una vez que se seleccione a los doce miembros del tribunal popular.
Por otro lado, hay cinco defensores que todavía no han expuesto las teorías del caso, a excepción de la de Marcela Acuña y la de Griselda Reinoso. La defensora oficial María Celeste Ojeda, en su intervención, consideró que Acuña, en caso de ser acusada, le comprendería únicamente un encubrimiento, conducta que no debería ser punible porque existe un lazo de consanguinidad, donde el parentesco puede afectar la posibilidad de denunciar o ser denunciado, como lo establece el artículo 178 del Código Procesal Penal.
También Ojeda, que debe defender a la casera, pidió el sobreseimiento definitivo de Griselda Reinoso, quien estaba a cargo de la chanchería junto con su esposo Gustavo Melgarejo en el campo Rossi.
El cuestionamiento de la defensora

Este punto fue cuestionado en la última audiencia por la defensora de César, al considerar que se avasallaron derechos del imputado y que el juez no había dado luz verde para investigar esas comunicaciones.
La defensora Gabriela Tomljenovic había relativizado un video donde los fiscales sintetizaron el cúmulo de pruebas contra el hijo del matrimonio Sena y Acuña. Pero fue mucho más contundente una prueba que se considera clave y demoledora sobre el perfil criminal de César: un "testigo protegido", en realidad en la Justicia ordinaria es de "identidad reservada", logró confirmar cómo César sometió a violencia de género a Strzyzowski.
El caso previo al asesinato
La joven y el testigo mantenían una amistad y facilitaron conversaciones contundentes: "En un minuto vi cómo se me pasaba la vida", escribió Cecilia a su confidente tras un supuesto hecho de maltrato físico que sufrió. Ella contó que Sena, practicante de artes marciales, le había hecho una llave en el cuello, lo que casi termina desmayándola.

Una posibilidad vigente: el abreviado
Lo que puede pasar en el último tramo de las audiencias posvacaciones es con final abierto. Pese a que la defensora de Gustavo Obregón y Fabiana González desechó la posibilidad de que "a esta altura" haya juicio abreviado para los llamados "leales" al clan Sena, todo puede revertirse una vez que se concluyan las audiencias. Sofía Puente, la abogada de los más confidentes de Sena y Acuña, considera que se dejó pasar la posibilidad y se hicieron más de diez pedidos al respecto. La única que no quiere aceptar juicio abreviado es Reinoso insistiendo en su inocencia y en que nunca vio o participó en la custodia del fuego mientras consumía los restos de Cecilia. Volviendo a esa posibilidad hay una parte del proceso judicial que no descarta el beneficio antes del juicio por jurados.

Será este año: el rol de dos jueces más
Sobre los plazos que aventuran otros, respecto de si el juicio se hará en 2026, la jueza es optimista en cuanto a cerrar las audiencias en agosto; si las defensas quieren cuestionar algún punto —y Fernández tendrá que resolver—, en caso de que haya un recurso intervendrán dos jueces de la Cámara Segunda: Julieta Dansey y Cristina Pisarello. Y no hay dudas: sus fallos serán inmediatos; y un dato central: no son recurribles. Esto quiere decir que si tal defensor plantea un cuestionamiento no tendrá las chances para ir al Superior Tribunal de Justicia. Por eso si bien existen intereses para demorar el juicio hasta 2026 —y sabiendo que la prisión preventiva de los siete acusados no puede pasarse más allá de junio de ese año— los tiempos permitirían realizar el juicio por jurados entre septiembre y octubre; tal vez en el Centro de Convenciones Gala u otro espacio distinto al Centro de Estudios Judiciales.
