La caída está atada a la suba general de precios y la consecuente pérdida de poder adquisitivo en la población.
De acuerdo con el INDEC, en junio último hubo lácteos que estuvieron entre los productos cuyos precios más se incrementaron respecto de mayo.
Si bien para la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano la leche entera subió en junio pasado solo 1%, a $44,7 el litro considerando un mix de productos, hubo otros productos que se incrementaron mucho más, incluso en algunos casos por encima del 2,7% de la inflación medida ese mes.
El yogur firme de 195 cc lo hizo un 18,7%, a $51,46; el dulce de leche de 400 gramos aumentó 1,9%, a $75,14; el kilo de queso sardo subió 4,7%, a $586,51, y el kilo de queso cremoso se encareció un 3,4% y alcanzó los $336,91 pesos.
Según el Indec, la manteca por 200 gramos subió 2,1% y su precio para la ciudad de Buenos Aires y el conurbano se ubicó en junio pasado en $92,97.
Por su parte, el valor de la leche en polvo entera por 800 gramos avanzó un 13,1%, a 304,68 pesos.
Si se compara el comportamiento de los precios desde enero pasado, se observan importantes saltos. La leche entera en sachet subió un 26,6%, por encima del 22,4% de la inflación del año.
El queso cremoso se encareció un 50%, el sardo también lo hizo un 50%, la manteca de 200 gramos un 33% y el yogur firme por 195 cc un 39,9%.
En medio de la suba general de precios y el freno en el consumo, a fines de abril último el Gobierno acordó con el sector privado una lista de 64 productos esenciales, incluyendo entre otros a yogures, postres y leches. En el caso puntual de la leche, Mastellone puso a su marca La Martona a $35,80 el litro.
Por su parte, Adecoagro, que se quedó con dos plantas que tenía Sancor, incorporó la marca Apóstoles a $45 el litro.