Tres empleados de una tienda de ropa deportiva fueron despedidos luego de que se constara que se habían llevado varios productos. Al comercio le faltaban más de 100 productos y había 50 cajas de zapatillas vacías. “No los quiero ver más acá, retírense”, les dijo el encargado.
Tres empleados de una tienda de ropa deportiva fueron despedidos luego de que se constara que se habían llevado varios productos. Al comercio le faltaban más de 100 productos y había 50 cajas de zapatillas vacías. “No los quiero ver más acá, retírense”, les dijo el encargado.
Fue una auditoría sorpresa en Cipolletti la que arrojó como resultado que faltaban más de cien productos y había 50 cajas de zapatillas vacías. “No los quiero ver más acá, retírense”, les ordenó el encargado a tres empleados.
Mientras se hacía el recuento ellos estaban con la cabeza baja y prometían pagar los productos faltantes.
El juicio laboral convalidó los despidos y los tres empleados desvinculados solo cobrarán la liquidación final. No tendrán derecho a indemnización, según se resolvió en la Cámara del Trabajo de Cipolletti.
El comercio pertenece a una red de tiendas deportivas con sucursales en Neuquén y Plottier. Surgió de la demanda que todos los años la administración practica auditorías sorpresivas para hacer el control de mercadería. Esos inventarios se realizan con la presencia de testigos de otras sucursales.
En este caso, el control detectó que faltaban más de cien productos y había unas cincuenta cajas de zapatillas vacías o con un solo calzado. Fue tal el asombro de los encargados que repitieron el control después de algunos días, aunque con el mismo resultado.
Se explicó en el juicio laboral que los empleados tenían permitido retirar productos para consumo personal siempre que no superaran el 20 por ciento de sus haberes. Esas operaciones debían registrarse en un cuaderno y con esa información, la administración realizaba los descuentos correspondientes en la próxima liquidación de sueldos.
De todas formas, la faltante de mercadería superaba ampliamente lo permitido. Los tres empleados despedidos, mientras se hacía el recuento, permanecían con la cabeza baja y prometían devolver los productos. Pero el encargado no toleró el resultado y los echó.
Durante el juicio se probaron todas las circunstancias y se confirmó el despido con causa.