En 2010 el Alassia fue incluido en el Programa Nacional de Cardiopatías Congénitas (con cobertura del Programa Sumar) que garantiza la resolución quirúrgica a todos los niños del país con diagnóstico de cardiopatía congénita que no tienen obra social. Desde ese momento se impulsó en el hospital local la realización de cirugías cardiovasculares de baja complejidad para la patología por parte del Servicio de Cardiología conformado por profesionales especializados, como así también la evaluación, diagnóstico y seguimiento de estos pequeños nacidos con alto riesgo; siendo derivados solo los casos de alta complejidad a centros en Rosario y Buenos Aires.
Solo en los dos primeros meses del año el Alassia realizó 14 cirugías cardiovasculares. Ahora Nación determinó la baja del efector de este plan que financia todas las intervenciones (quirúrgicas o hemodinámicas) de niños y adolescentes hasta 19 años con malformaciones congénitas del corazón.
La resolución está fechada el 2 de noviembre de 2018 y fue tomada en el marco de la “reevaluación de Centros Cardiovasculares Tratantes 2015/2016”. En la misma se indica que la decisión fue tomada a partir de un "informe de 2015 del Consejo Consultivo, documentación de reevaluación de centros del Programa Sumar de ese mismo año; e información del Centro Coordinador de Derivaciones de Pacientes con Cardiopatías Congénitas".
Ante la sorpresa de esta disposición, autoridades provinciales pidieron reunirse con referentes nacionales para conocer los fundamentos de la determinación. En principio, el encuentro sería el próximo lunes en Santa Fe y participarían todos los actores involucrados. No obstante aclaran que las cirugías programadas en el hospital seguirán realizándose con normalidad.
Entre los centros tratantes que fueron dados de baja también figura el Hospital Materno Infantil "San Roque" de Paraná, Entre Ríos.
¿Qué son las cardiopatías congénitas?
Las cardiopatías congénitas son malformaciones en el corazón que se producen en el período de gestación en el útero materno. Aparecen en 10 de cada 1.000 nacidos vivos y es la primera causa evitable de mortalidad en el recién nacido. La detección precoz, dentro de la panza de las embarazadas, es la única forma de prevenirlas.
Esto permite que ese chico nazca en una maternidad preparada, un lugar adecuado para el tratamiento de su patología según la complejidad, que la mayoría de las veces necesita de una intervención quirúrgica; y que si es alta deberá ser en otra ciudad como Buenos Aires, donde hoy existen los medios necesarios para la atención de casos extremos.