El Ministerio de Migraciones trabaja en una iniciativa que allana la regularización de migrantes y favorece la contratación en origen de sectores clave, según 'El País'.
El Gobierno está trabajando en una modificación normativa que permitiría la incorporación de miles de trabajadores extranjeros al mercado laboral español, según ha adelantado El País este viernes. Se trata de una iniciativa impulsada desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones que dirige José Luis Escrivá y que supondría necesariamente la modificación de la Ley de Extranjería.
Tal y como recoge el citado medio, uno de los objetivos de esta nueva norma es puramente económico, puesto que además de allanar el camino a la regularización de miles de extranjeros, permitirá que nuevos trabajadores se incorporen a sectores que acusan una aguda carencia de personal. Se trata de ámbitos como el del transporte, el campo, la hostelería y la construcción, pero también en el digital.
″[La ley de Extranjería] no es suficientemente ágil para responder a los cuellos de botella que se producen en el mercado laboral”, han comunicado fuentes gubernamentales a El País, sobre las razones que motivan una reforma normativa que todavía no está cerrada y, por lo tanto, sigue sujeta a posibles cambios.
Los tres grandes cambios de la iniciativa
Según el borrado del real-decreto, al que ha accedido dicho diario, la reforma cuenta con tres grandes pilares. Por un lado, amplía las posibilidades de contratación en origen más allá de sectores en los que ya funciona este sistema como el de los temporeros. También facilita que los estudiantes extranjeros puedan trabajar y se crea una figura que permitirá obtener papeles a los inmigrantes en situación irregular cuando sean formados en ámbitos laborales donde se necesita mano de obra.
Asimismo, la modificación normativa contempla eliminar para favorecer el emprendimiento -no solo el de los grandes inversores, anota- y el trabajo autónomo de los extranjeros. También señala El País, que no se trata de una regularización masiva de migrantes, sino que la clave está en que busca promover la contratación de trabajadores desde sus propios países de origen, al tiempo que se suavizan los requisitos para que aquellos que ya están en España de forma irregular puedan conseguir autorizaciones de trabajo y de residencia.
En estos momentos, el departamento de Escrivá está trabajando para lograr el visto bueno de los otros ministerios a los que implica el real-decreto. El pasado martes, se acordó la tramitación urgente de la norma en la reunión del Consejo de Ministros.
El descontento de los sindicatos
UGT y CCOO han lamentado que el Gobierno rompa el consenso existente hasta ahora respecto a la política de migración laboral y califican la propuesta de “clasista” y que “responde a los intereses de ciertos sectores económicos” y no de los trabajadores.
Así lo indican ambos sindicatos en un comunicado conjunto este viernes. UGT y CCOO reconocen que el Reglamento de la Ley de Extranjería y algunos de sus elementos necesitan una reforma y así lo han reclamado, pero insisten en que no podían esperar la forma en la que ha actuado el Gobierno.
A su juicio, en los últimos meses el Ejecutivo ha roto el equilibrio y el consenso en torno a la política de migración laboral, pero también ha acentuado “la segmentación” para convertirla “en un traje a medida” de ciertos “intereses económicos” y de las necesidades de algunos sectores, pero no de los trabajadores migrantes.
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