Se trata del agente José Matías Paz, quien prestaba servicio en la localidad de Joaquín V. González y a quien el fiscal penal Gonzalo Gómez Amado le imputó los delitos de abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores, por los cuales el Código Penal establece penas de hasta 15 años de prisión.
Todo surgió cuando un video íntimo, en el que aparece el policía con una menor de 16 años, se viralizó por las redes sociales. La difusión del video llegó hasta familiares de la menor, quienes alertaron a los padres, que radicaron la denuncia, con lo que se iniciaron las actuaciones penales.
La menor, que reveló que durante los festejos ingirió bebidas alcohólicas, por lo que no estaba del todo consciente, había acordado un encuentro en esa fiesta con Paz, a quien conocía a través de las redes sociales.
En su decreto de imputación, el fiscal indicó que el policía se habría aprovechado del estado de ebriedad de la menor para cometer el abuso sexual, que quedó claramente evidenciado en el video que posteriormente se viralizó. A partir de estos elementos de pruebas, Gómez Amado solicitó al Juzgado de Garantías la detención del policía, que se concretó de inmediato.
Los voceros indicaron que, tras la audiencia de imputación, el fiscal solicitó que se mantenga la detención del suboficial y dispuso otras diligencias, entre ellas la declaración de la menor en cámara Gesell.
Desde la Policía de Salta se informó este lunes que el Ministerio de Seguridad decidió apartar al agente de su cargo en la fuerza, hasta tanto se resuelva su situación procesal, y el encargado de la Oficina de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad, Enrique Cornejo Costas, se trasladó a la zona de los hechos, a unos 250 kilómetros al sudeste de la capital salteña, para entrevistarse con las partes.