El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, sorprendió hoy a sus compatriotas con tres anuncios que pudieran cambiar la historia y el funcionamiento del país.

El mandatario dio su mensaje a la nación por sus primeros cuatro años de Gobierno con un recuento de los logros en la lucha contra las pandillas y subrayó que los éxitos en seguridad son irrefutables.

Ambos temas ocuparon los primeros minutos de su intervención, que estuvo precedida por apoyos de los asistentes a la reelección del mandatario en febrero de 2024.

Dijo Bukele que en los cuatros primeros años de su Gobierno, tal vez no fuera su mayor éxito la seguridad, sino alcanzar la capacidad para que el país se reinventara, porque “podemos aspirar a más”.

Todavía, indicó, no estamos donde queremos, antes de pasar a realizar tres anuncios medulares en su intervención, frente a un auditorio que lo aplaudió repetidamente.

Con el objetivo de reorganizar la administración política administrativa de El Salvador, Bukele propuso reducir el número de municipios del país de 262 hasta 44.

Solo tendremos 44 alcaldes con sus respectivos Concejos Municipales. No van a desaparecer las identidades, pues pasarán a los distritos, acotó.

Seguidamente, el presidente propuso a la Asamblea Legislativa reducir el número de miembros de ese foro de 84 a 60, tal como existía antes de los Acuerdos de Paz, suscrito después de la guerra.

El tercer anuncio está relacionado con el lanzamiento de una guerra contra la corrupción, el cual consideró como el más importante de los tres y se llevará a cabo con todas las herramientas del Estado.

Vamos, de la misma manera que fuimos contra las pandillas, contra los delincuentes de “cuello blanco”, afirmó.

Vengan de donde vengan, nadie tiene derecho a ser corrupto. De la misma forma que construimos una cárcel contra las pandillas, subrayó, vamos a construir una para los corruptos. Incautaremos todo lo que tengan y devolverán lo robado al pueblo, remarcó.

Anunció que en esta noche, el Fiscal General de la República, ausente del acto, estaba ocupando las propiedades y todos los bienes del expresidente Alfredo Cristiani, que pasarán a manos del pueblo.

El Salvador no volverá a ser la finca de nadie, señaló en referencia a los presuntos ladrones que se apropiaron de los bienes del pueblo.

Los delitos de corrupción por ley de la Asamblea no prescriben en el tiempo e iremos detrás de los corruptos hasta erradicarlos, puntualizó.

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