La búsqueda de dos hermanos de 2 y 6 años, que habían sido secuestrados por su propio padre en la localidad de Guichón, culminó de la peor manera. Los cuerpos de los menores fueron encontrados sin vida, generando una profunda ola de dolor e indignación en toda la sociedad uruguaya. El principal sospechoso se quitó la vida.
La comunidad de Guichón, en el departamento de Paysandú, y todo Uruguay se encuentran sumidos en el más profundo estupor tras confirmarse el hallazgo de los cuerpos sin vida de los hermanos de 2 y 6 años. Los niños eran intensamente buscados desde que su madre denunciara que habían sido secuestrados por su padre.
El desenlace de una búsqueda desesperada
El operativo de búsqueda, que mantuvo en vilo a todo el país, tuvo un final desolador. Fuentes policiales informaron que los cuerpos de los pequeños fueron encontrados en una zona rural, dentro del vehículo del padre. La denuncia inicial fue radicada por la madre de los niños, quien alertó a las autoridades que su ex pareja se había llevado a sus hijos sin su consentimiento y temía por la seguridad de ellos.
Tras el terrible hallazgo de los menores, las autoridades confirmaron también que el padre de los niños fue encontrado sin vida en el mismo lugar. La principal hipótesis que maneja la fiscalía es que el hombre habría asesinado a sus hijos y posteriormente se habría suicidado.
Una comunidad en estado de shock
El trágico suceso ha provocado una fuerte conmoción a nivel nacional. La fiscal del caso, Cecilia Irigoyen, se trasladó de inmediato al lugar de los hechos para supervisar las primeras actuaciones y el trabajo de la Policía Científica. Se espera que los resultados de las pericias forenses puedan arrojar más luz sobre las circunstancias exactas que rodearon al doble filicidio seguido de suicidio.
Vecinos y allegados a la familia manifestaron su profundo dolor e incredulidad ante lo ocurrido. El caso ha reabierto el debate sobre la violencia vicaria y la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección para los menores en situaciones de conflictos familiares graves.
