Fue lugarteniente de Osama Bin Laden y controlaba al grupo terrorista desde la muerte de este último. Joe Biden dará un discurso al país para dar cuenta de la exitosa acción antiterrorista.
La CIA mató este fin de semana en un ataque con drones en Afganistán al líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, considerado uno de los ideólogos de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Ayman al-Zawahiri fue impulsor junto a Osama bin Laden de la gran oleada de ataques violentos que sacudieron también a ciudades como Londres y Madrid en los años siguientes. Se espera que el presidente Joe Biden de un discurso en cadena nacional desde la Casa Blanca con más detalles de la operación.
Tras la muerte de Bin Laden, Al-Zawahiri se erigió en el máximo exponente del grupo terrorista.
Según The Washington Post, el gobierno de Joe Biden sabía de la muerte desde el domingo, pero se retrasó en dar a conocer la información hasta que pudo confirmar su fallecimiento.
Los funcionarios de la Casa Blanca declinaron confirmar la muerte del líder terrorista, pero señalaron en un comunicado que Estados Unidos llevó a cabo una operación antiterrorista "exitosa" contra un objetivo importante de Al Qaeda, y añadieron que "no hubo víctimas civiles".
La casa en la que se encontraba Al-Zawahiri cuando fue abatido era propiedad de un colaborador del alto dirigente talibán Sirajuddin Haqqani, según dijo a la agencia AP un alto funcionario de los servicios de inteligencia. El funcionario añadió también que un equipo terrestre de la CIA y un reconocimiento aéreo realizado tras el ataque con drones confirmaron la muerte de Al-Zawahri.
"Estamos ante un gran éxito de los esfuerzos antiterroristas de Estados Unidos. El resultado de incontables horas de recolección de inteligencia durante muchos años", dijo a The New York Times el ex agente de la CIA. oficial y alto funcionario del Pentágono, Mick Mulroy. En esa línea, agregó: "Probablemente creía que nunca seríamos capaces de localizarlo. Pero estaba equivocado".
Ayman Al Zawahri había aparecido en un video para conmemorar los 20 años de los atentados del 11S, a pesar de los rumores de que había muerto meses antes.
Un triunfo para Joe Biden
La operación supone un triunfo para la Administración de Biden en materia antiterrorista.
El presidente estadounidense cuenta con los niveles de popularidad más bajos que se recuerdan para un líder con tan poco tiempo en la Casa Blanca, pero en las últimas semanas ha encadenado varios golpes de efecto, como el acuerdo con su senador rebelde, el demócrata Joe Manchin, para impulsar su agenda política y económica, o la aprobación en el Senado de una ley que incentive la fabricación de microchips estadounidenses ante la feroz competencia china.