Desde que se comenzó la construcción de la rotonda ubicada en la intersección de la ruta 12 y calle Formosa, numerosas fueron las voces que advirtieron que la rotonda era chica y que no permitiría el giro de los camiones de gran porte.
A pesar de las advertencias las obras continuaron con la habitual indiferencia que se suele hacer la obra pública a las normas de construcción existentes, y a las medidas racionales para evitar inconvenientes.
Incluso hubo el caso de un camión de la propia empresa constructora que se destalonó por haber mordido la rotonda.
Ante las evidencias incontrastables de que los camiones de gran porte no pueden girar en el diseño original de la obra, ahora se ven obligados a ampliar el asfalto, demoliendo parte de las obras que ya fueron construidas.
En las fotos se pueden observar las líneas de cal que marcan la nueva traza del asfalto, que incluso ponen en duda las protecciones construidas para los accesos al puente sobreelevado existente.
En el video se puede observar el radio de giro de un camión de gran porte, y la actual traza de la ruta.
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