El director del Hospital Perrando, Daniel Pascual, se responsabilizó por la aplicación de la dosis de la vacuna contra el coronavirus que recibió el cura párroco, Rafael Del Blanco.
En medio de la polémica por el presunto mal uso de las escasas vacunas, Pascual aseguró que tomó esa decisión debido a que el sacerdote está en contacto con personas enfermas, tiene hipertensión y "es anciano". En medio de la campaña de vacunación contra el coronavirus en el Chaco surgió una polémica por presuntos privilegios a la hora de decidir quién se aplica y quién no. Si bien en esta primera fase, las 7700 dosis que llegaron a la provincia están destinadas para el personal de Salud que batalla en la primera línea de la enfermedad, lo cierto es que una de esas vacunas fue a parar al sistema inmune del mediático cura párroco de Resistencia, Rafael Del Blanco.
¿Cómo se supo que recibió la inmunización? Él mismo lo reconoció el domingo en un mensaje de agradecimiento que publicó en su cuenta de Facebook. La polémica y los cuestionamientos por presuntos favoritismos y tráfico de influencias no tardaron en llegar. De hecho, en conferencia de prensa, el propio subsecretario de Promoción de la Salud, Atilio García, aseguró que se abrirá una investigación para determinar qué ocurrió, al tiempo que sostuvo que no hay privilegios para nadie en esta cuestión.
Horas después, el director del Hospital, Daniel Pascual, se hizo cargo de la decisión de vacunar al religioso.
“Está siempre en contacto con enfermos, desde las misas de sanación hasta las visitas domiciliarias. Además, tiene hipertensión, es anciano como yo que también me vacuné y sólo adelantamos unos días su vacunación porque en 10 días comenzará la vacunación a todos los mayores de 70 años y enfermos crónicos con morbilidades que los predisponen a morir de COVID”, remarcó. Cabe aclarar que Rafael Del Blanco tiene 57 años.
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