Los padres de Matías Benicelli y de Luciano y Ciro Pertossi declararon en el juicio. Lloraron, hablaron de "desgracia" y de amenazas recibidas.
En el marco del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, este martes declararon familiares de tres de los ocho rugbiers imputados y juzgados en los Tribunales de Dolores. Se trata de Héctor Eduardo Benicelli - padre de Matías Benicelli – y Mauro Pertossi, padre de los hermanos Luciano y Ciro Pertossi.
Según detalló el periodista Fernando Tocho, mientras hablaban, Héctor Eduardo Benicelli y Mauro Pertossi lloraron ante los jueces, mientras que Benicelli expresó: "El dolor no se cura con más dolor".
Mauro Pertossi, padre de Ciro y Luciano Pertossi, dos de los acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa, dijo hoy que sus hijos "no son asesinos" y que lo que pasó es "una desgracia".
"Todo esto es una desgracia. Uno cree que las cosas están encaminadas en la vida, llega esto, y no sé qué pensar. No puedo creer que estamos viviendo este momento. Mis hijos no son asesinos. Son chicos, son adolescentes, son vagos como decimos en el barrio pero no puedo creer de lo que se los está acusando", dijo Mauro Pertossi frente al Tribunal Oral Criminal 1 de Dolores, al declarar como testigo.
En ese marco, Mauro Pertossi se colocó como víctima de las repercusiones del crimen, aseguró que perdió su trabajo debido a "lo mediático" y que recibió amenazas.
"He recibido amenazas, están hechas las denuncias pero no importa: mientras sean por teléfono no pasa nada”, declaró Pertossi padre llorando.
“Tremendo por lo mediático que fue esto. Después de 25 años de trabajo, me han pedido que me desligara. Había empezado de chico en una automotriz internacional, Toyota Argentina, ahí crecí, me han capacitado, uno lo que hace es trabajar, trabajar, trabajar, para un mejor pasar. Ahora no consigo trabajo, el sostén de la familia es mi esposa. Tengo un emprendimiento", detalló.
Héctor Eduardo Benicelli- padre de Matías Benicelli, uno de los acusados de golpear a Fernando antes de que caiga al piso - describió cómo era su situación, sostuvo que "tiene mucho dolor, mucha angustia, que nunca imaginó pasar por algo así, que no salió con esa intención (de matar a Báez Sosa).
"No tenemos más vida, estamos acosados, no podemos salir a la vereda, a la calle, me han querido pegar", sostuvo Benicelli padre.
"No encuentro una palabra justa para definir esto. Fueron tres años de mucho dolor. Sé que hay mucho dolor contra nosotros, el dolor no se cura con más dolor, no le encuentro explicación. Lo que pasó fue terrible. Me levanto con insultos, en el trabajo la paso mal. Es un dolor terrible para todos, y es terrible lo que sigue pasando. No puedo vivir con la guardia alta, viendo que no salga alguien escondido de atrás de una planta", declaró Héctor.