En el barrio privado El Tipal, ubicado a menos de 20 minutos del centro de la capital salteña, mataron a una mujer y el principal sospechoso es su esposo. Antes de que se conociera la noticia del crimen, la pareja de la víctima le mandó un mensaje a un amigo en el que aseguraba que “no podía más”.
El viernes 4 de agosto, la Policía de Salta recibió una llamada en donde un amigo del presunto asesino alertaba lo que había sucedido en la casa de José Eduardo Figueroa, el sospechoso del asesinato de Mercedes Kvedaras.
Fuentes de la investigación le confirmaron al diario El Tribuno que la vícitma habría muerto por asfixia, mientras que Figueroa presentaba una herida en el cuello que él mismo se habría provocado tras el brutal asesinato.
También señalaron que continúan analizándose las cámaras de seguridad del sistema de vigilancia del barrio privado, dado que se sospecha que el hombre podría haber asesinado a su pareja la noche anterior (jueves) o durante la madrugada de este mismo viernes.
Esta hipótesis encuentra su fundamento en un dato curioso, revelado por un conocido de la pareja que fue a buscar a sus hijos para llevarlos al colegio. El testigo declaró que el viernes, cerca de las 7 de la mañana, ninguno de los dos se encontraba en el domicilio.
En relación al estado de salud de Figueroa, se indicó que fue rápidamente trasladado e internado en el Hospital San Bernardo, en donde permanece detenido y fuera de peligro.
Un mensaje de WhatsApp y las sospechas de un femicidio
El Tribuno reveló que el amigo de Figueroa, que encontró la escena del crimen en la casa, acudió al lugar tras un mensaje que el propio agresor le había mandado vía WhatsApp.
Allí le reveló que su pareja atravesaba una crisis matrimonial y que tenía miedo de hacer algo malo. Luego expresó una contundente frase: “No puedo más con esto”.
Si bien este hombre llamó a la Policía para que arribaran a la casa antes de que él llegara, se encontró solo en la puerta y decidió ingresar.
Minutos antes de las 12 del viernes, en un nuevo llamado, éste avisó que su amigo había matado a su mujer y que ninguno tenía signos vitales, aunque luego se confirmó que Figueroa sí estaba con vida.
Por el hecho interviene la fiscal penal de la Unidad de Femicidios, Mónica Poma, que solicitó la detención de Figueroa ante el Juzgado de Garantías en turno.
Fuente: TodoNoticias