Ayer, el músico que se encuentra detenido con prisión preventiva desde diciembre de 2016 en el penal de Marcos Paz, declaró durante cerca de cinco horas, haciendo eje en su vida y su recorrido por la escena musical, sin llegar a los hechos que se le imputan.
En la declaración, realizada sin público para preservar la intimidad de las víctimas y por los antecedentes de filtraciones de audios de las audiencias, Aldana también se refirió al movimiento feminista y a su capacidad de presión sobre la prensa y la justicia.
Este miércoles continuará hablando ante el tribunal y, según estimó su abogado defensor, Nicolás Grasso, es posible que no termine su exposición y que requiera una audiencia más para ampliar su declaración, un derecho que le asiste como imputado durante todo el proceso.
El juicio estaba programado para desarrollarse en cuatro meses pero ya lleva más de un año por los más de 80 testigos que declararon y por los conflictos con la defensa del cantante que llevó al tribunal primero a multar al abogado Rodolfo Patiño y luego a desvincularlo del juicio por "inconductas reiteradas".
Apenas el rockero termine su exposición, los jueces Rodolfo Bustos Lambert, Ana Dieta de Herrero y Rodolfo Goerner, dispondrán que se pase a la instancia de los alegatos de las partes, que iniciará el representante de tres de los siete víctimas, Sebastián Da Vita, integrante del Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico a Víctimas de Delitos del Ministerio Público de la Defensa.
Después de las querellas expondrán su análisis de los hechos ventilados en el juicio la fiscalía, el defensor y quedará allanado el camino entonces para las últimas palabras de Aldana, si quisiera darlas, y el veredicto por inocente o culpable y la pena impuesta.
En caso de ser encontrado culpable, Aldana podría recibir hasta 20 años de prisión por cada caso, el máximo de la pena que establece el Código Penal.