Los gobiernos y las empresas de los mercados emergentes tuvieron una primera semana del año récord en términos de emisión de deuda, con ventas de bonos por valor de casi 28.000 millones de dólares, en un intento de ponerse al día tras las turbulencias del mercado del año pasado.
Los gobiernos y las empresas de los mercados emergentes tuvieron una primera semana del año récord en términos de emisión de deuda, con ventas de bonos por valor de casi 28.000 millones de dólares, en un intento de ponerse al día tras las turbulencias del mercado del año pasado.
Durante el tercer trimestre del año pasado, los niveles de deuda sobre el PBI de los países emergentes ya había alcanzado niveles récord, pese a una baja de u$s6,4 billones en la carga global en el tercer trimestre, a u$s290 billones, en medio de la fortaleza del dólar y un menor ritmo de ventas de bonos, había advertido el Instituto de Finanzas Internacionales (IFF).
Indonesia, Hungría, Eslovenia, Rumania y Hong Kong fueron algunos de los países que más rápido salieron al mercado, ayudando a los soberanos a vender deuda por valor de 21.300 millones de dólares, frente a los 13.400 millones de la primera semana de 2022, según analistas de Morgan Stanley.
Otros 6.500 millones de dólares procedieron de empresas de mercados emergentes, con lo que la cifra combinada de 28.000 millones de dólares supera con creces el total de 19.000 millones de dólares de la primera semana del año pasado y el récord anterior de 24.000 millones de dólares de 2021.
El aumento de las tasas de interés a escala mundial supuso que la emisión de deuda soberana se redujera a la mitad, a un mínimo de más de una década de 87.000 millones de dólares el año pasado. La cifra contrasta con los 176.000 millones de dólares de 2021 y los aproximadamente 230.000 millones de 2020, cuando los gobiernos pidieron prestadas cantidades récord durante la pandemia de COVID-19.
Combinado con una emisión de deuda corporativa marcadamente inferior, el total general del año pasado fue de poco más de 300.000 millones de dólares. Eso también fue menos de la mitad de los 713.000 millones de dólares de 2021, según los cálculos de Morgan Stanley, y también la cantidad más baja desde 2021
Qué pasa con la deuda de Argentina
La fuerte suba de las tasas de interés que llevaron adelante la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y otros bancos centrales del mundo en 2022 provocaron un encarecimiento del costo de financiamiento internacional y empujaron a muchos países al borde de crisis de endeudamiento. Hoy, más de u$s600.000 millones en bonos y préstamos están en situación de riesgo, sobre todo, en los países emergentes y más vulnerables financieramente, entre los cuales se encuentra la Argentina.
Especialistas advirtieron que la situación de la deuda de países emergentes preocupa a los inversores, aunque señalan que no es una situación nueva, ya que desde que se desató la pandemia de Covid-19 todos los emergentes acrecentaron su deuda para financiar los gastos excepcionales del escenario sanitario.
un reciente informe del Banco Mundial (BM) advirtió que los países más pobres del mundo dedican actualmente más de una décima parte de sus ingresos por exportaciones al servicio de la deuda externa, la proporción más alta desde el año 2000. "La crisis de la deuda a la que se enfrentan los países en desarrollo se ha intensificado", afirmó en un comunicado el presidente del Grupo del BM, David Malpass.