A pesar de las promesas de desinflación, la suba del dólar en julio provocó una nueva ola de listas con aumentos de hasta 9% en productos de consumo masivo. El Gobierno endurece su postura y presiona a supermercados y mayoristas para que rechacen las remarcaciones, advirtiendo sobre un posible "aumento transitorio" de la inflación
La tensión entre el Gobierno, los supermercados y las empresas de alimentos se intensificó en los últimos días tras la llegada de nuevas listas de precios con importantes incrementos. A pesar del discurso oficial sobre la desaceleración de la inflación, el reciente movimiento del tipo de cambio en julio ha desatado una nueva "pulseada" en el mercado, con aumentos que podrían impactar directamente en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto.
La estrategia del Gobierno: "No acepten locuras"
Ante la escalada de precios, la administración nacional ha optado por una estrategia de presión directa sobre los grandes jugadores del mercado. El ministro de Economía, Luis Caputo, se comunicó con las principales cadenas de supermercados y mayoristas, pidiéndoles que no convaliden las subas que consideró "locuras". Fuentes cercanas al sector indican que el pedido es que se rechacen listas con incrementos mayores a un 4% o 5%, ya que, según el Gobierno, estos porcentajes superan la variación del dólar.
El presidente Javier Milei también se sumó a la campaña, replicando en sus redes sociales un mensaje que sugiere a los consumidores una acción directa: "Si te aumentan, no compres". Este mensaje, que se aleja de la lógica de libre mercado, busca generar una presión de la demanda sobre la oferta, incentivando a los consumidores a castigar a las empresas que remarcan precios por encima de lo que el Gobierno considera razonable.
Detalles de los aumentos y el rol de las empresas
Según reportes de diversas fuentes, las listas de precios que están llegando a las cadenas de supermercados incluyen subas que varían entre el 3% y el 9% en productos esenciales como alimentos, bebidas y artículos de limpieza. Algunas de las empresas mencionadas por haber enviado nuevas listas son:
- Mondelez: hasta un 9%
- Unilever: entre un 7% y 8%
- SC Johnson: un 7%
- Papelera del Plata: un 7%
- Arcor: entre un 3% y 5%
- Mastellone (lácteos): un 4%
- Danone: un 3.5%
La reacción de las empresas ha sido diversa. Algunas, como Molinos, han dado marcha atrás con los aumentos tras la presión del Gobierno, un gesto que fue celebrado por el ministro Caputo en su cuenta de X. Otras, como Arcor, negaron los incrementos, aunque los supermercados aseguran que sí los aplicaron.
El impacto en la inflación de agosto
Los economistas y las consultoras ya anticipan que esta pulseada por los precios tendrá un impacto directo en el índice de inflación de agosto. Se proyecta que el IPC de julio se mantendrá por debajo del 2%, pero para el mes actual, se espera un rebote inflacionario, con estimaciones que lo ubican cerca del 3%. El Gobierno, por su parte, admite la posibilidad de un aumento “transitorio”, pero confía en que no se mantendrá en el tiempo debido a la falta de "convalidación monetaria". Este escenario pone en riesgo el objetivo del Gobierno de lograr una desinflación sostenida y agrega incertidumbre al clima económico previo a las elecciones.
